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OCDH recuerda al gobierno de Cuba la obligación de proteger a los ciudadanos frente al Covid-19

Cuestiona que las autoridades cubanas hayan solicitado el arribo de más turistas extranjeros, apoyadas en rumores sin respaldo científico.

Recuerda que Cuba es un país con una elevada población adulta, con patologías crónicas.

Muestra preocupación por la población carcelaria, debido a la insalubridad, la mala alimentación y la deficiente atención médica en las cárceles.

Madrid, 18 de marzo de 2020

El coronavirus Covid-19 es una realidad universal de la que es imposible sustraerse. Ante su acelerado avance, los gobiernos de los países afectados han decidido implementar diferentes protocolos para enfrentar la pandemia. Algunos se han concentrado en detección masiva de casos de contagio y otros en estrictas acciones de aislamiento, pero casi todos han apostado por el cierre total o parcial de fronteras.

En el caso de Cuba, el gobierno va en dirección contraria y ha solicitado el arribo de más turistas extranjeros, lo cual calificamos de irresponsable. Apoyado en rumores sin respaldo científico, las autoridades han venido convocando a visitar Cuba en medio de la epidemia, con el argumento de que el virus desaparece a más de 30º de temperatura, algo que la Organización Mundial de la Salud ha desmentido en un trabajo publicado en su sitio web.

Debemos recordar que el Covid-19 afecta a personas de todas las edades, pero con mayor incidencia de casos mortales en mayores de 60 años. Cuba es un país con una elevada población dentro de ese grupo etario, y el 80,6% de los mayores padece algún tipo de patología crónica, según la Encuesta de Envejecimiento de la Población 2017, publicada por la Oficina Nacional de Estadísticas.

Igualmente nos preocupa la población carcelaria, teniendo en cuenta la insalubridad, el hacinamiento, la mala alimentación y la deficiente atención médica predominantes en los centros de internamiento.

Alarma que el gobierno cubano haya decidido permanecer impasible ante la amenaza que significa la pandemia. Es nuestro deber exigir un comportamiento acorde con la crisis global a la que nos enfrentamos. El gobierno de Cuba tiene la obligación de proteger y salvaguardar los intereses de los ciudadanos, la vida antes que todo.

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