Carta de joven activista a Bruno Rodríguez
A: Bruno Rodríguez Parrilla, Ministro de relaciones Exteriores de Cuba.
Quien le escribe y dirige estas palabras a usted, es un joven cubano de la provincia de Pinar del Rio, con 36 años de edad, respondiendo y preguntándole a su vez, algo en cuestión a la respuesta que usted ha dado en conferencia de prensa en Europa, por las palabras que dirigió el presidente de los Estados Unidos con respecto a la política dirigida al gobierno cubano.
Usted declaro y dio firmeza a la opinión publica internacional que en nuestro país no se violan los derechos humanos, no se realizan detenciones arbitrarias y que no hay oposición, que solo son pequeños grupos politiqueros y vividores.
Para usted y para su grupo reducido de camaradas POLITICOS Y GOBERNANTES DEL PAIS de todos los cubanos, yo estoy en el gran listado de miles o millones de cubanos que hasta ayer permanecieron callados y sufridos empobrecidos económicamente y analfabetos de cultura política, soy uno de los que piensa diferente a usted y a sus colegas, uno de los que estamos en desacuerdo de las políticas que ha llevado este gobierno desde el año 1959 a la actualidad y de las proyecciones de las futuras a llevar, las políticas que han tenido a este pueblo, limitados y cohibidos de sus derechos, de pensar y expresar sus pensamientos, aislado del desarrollo y la prosperidad, pegados y ahogados de necesidades y pobrezas, con necesidad de medios de transporte, un pueblo caminando sobre las calles, caminos y aceras cada día más deteriorados, de localidades, municipios y provincias inundados de salideros de aguas potables y sanitarias, con escasez de medicamentos, alimentos y vestuario, sin salarios para cubrir sus necesidades, obligados a violar leyes y resoluciones laborales y judiciales en los empleos o corromperse (Robar) para mantener sus hijos y familiares, necesitados de transporte, comunicaciones, ansiosos de poder tener libre economía y negocios con otros pueblos o personal extranjero, trabajar sin presiones o condiciones de ideales o políticas del gobierno, recibir pago o salario negociado o convenido directamente con el empresario privado y no con agencias empleadoras subordinadas al gobierno y que pagan lo que les combine (intermediarias y explotadoras), pueblo explotado en los centros de trabajo y funciones, pueblo que vive bajo condiciones de una política de estado y obligado a estar acorde al proceso revolucionario comunista, pueblo trabajador con deseos de pertenecen o asociarse a sindicatos independientes, que respondan y defiendan sus necesidades e intereses no la de la administración, (no a la de Raúl, único dirigente, gerente, director o empresario de todas las estatales del país), pueblo atado, coaccionado, de constantes violaciones de sus derechos y represiones, sedientos de libertad de pensamiento, de expresión, de propiedades, de autonomía, de pertenecer al partidos independientes (pluripartidismo), de independencia y procuradores de actuar por si mismo y no direccionado o dirigidos por un único gigante o gobernante, (Fidel o Raúl), pueblo constreñido a botar y reconocer su ley electoral (supuestamente democrática) pueblo de hormigas locas que solo se pasan la vida desertando de las pisadas de los gigantes (Los castros), desesperados a cada minuto en busca de alimentos para satisfacer sus necesidades, pueblo monitoreado e intervenidos diariamente en las comunicaciones y vida social, pueblo que vive bajo tres gobiernos: 1- Dirección de la Seguridad del Estado, 2- Partido Comunista de Cuba, 3- Asamblea Nacional (solo en el tercero tenemos una limitada participación, siendo a nivel de circunscripción).
Tengo motivos, pruebas, elementos y como demostrarle todo esto.
Respóndame usted, si como yo a usted lo detuvieran en la calle o en su vivienda cuantas veces le diera la gana a los oficiales de la llamada dirección de la seguridad del estado, le prohibieran salir del país, de la provincia y hasta de su misma casa, le arrebataran de sus manos o domicilio, sus pertenencias con devolución o sin devolución, en los casos devueltos sean en mal estado, amenazaran y coaccionaran a sus hijos, esposa, madre y familiares, que constantemente corra peligro su vida y su familia y seres queridos vivieran una vida preocupada y preguntándose ¿si te verán mañana?, que amenacen y acosen a las personas que por simpatía o ideales son tus amistades, prohibiéndole todo vinculo con usted, lo detuvieran por prolongadas horas de forma arbitraria, impugnándole delitos injustos y falsos, manteniéndolo incomunicado y desaparecido para sus familiares, lo expongan a responder o pagar sanciones o multas injustamente, lo maltraten, golpeándolo, torturándolo de forma psicológica y agresiva. Para mas elemento, lo asalten o detengan, al frente de su madre, hermana y esposa, le roben o despojen de sus pertenencias compradas con su dinero, sin documento que les acredite las acciones a los oficiales actuantes ni le den copia de las acciones y ocupaciones.
Esto me a sucedido a mi y a hermanos o colegas que pensamos diferentes, pensamos y vivimos al lado del pueblo con la realidad, la realidad que usted ignora, la realidad que desnuda a los funcionarios y cuadros del Gobierno y el Partido comunista de Cuba a los que usted pertenece, que son indolentes ante las necesidades y precaria vida que sufre este pueblo sin amparo de ustedes, quienes le deben el amparo.
Todo esto lo he expuesto ante los cuadros, dirigentes y funcionarios en distintos niveles de localidad, municipio, provincia y país y hasta la fecha no e tenido respuesta alguna. Solo indolencias e ignorancias, tapando, justificando las acciones y desamparos, prometiendo soluciones que no se ven.
Le sugiero a usted que consulte la declaración universal de los derechos Humanos, los derechos del niño, las cuales su gobierno ha sido firmante, consulte su propia constitución de la república, el código penal vigente la ley de procesamiento penal, la procesal militar, y desearía que tipifique cuantos delitos y violaciones se cometen a diario, por militares y subordinados de su gobierno. De necesitar pruebas sobre todo esto usted puede dirigirse a mis publicaciones en internet, llamarme o escribirme a mi dirección de correo. Le pondría en sus manos toda esta información para que en una próxima conferencia de prensa no sea tajante o convencido de sus declaraciones sobre derechos humanos y democracia.
Lázaro Luis Ruiz Echevarría
Observador de los Derechos Humanos y defensor del Pueblo.