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Un junio histórico para el sindicalismo independiente cubano

A pesar de las golpizas, las detenciones arbitrarias y las multas, el activista Iván Hernández Carrillo, de 46 años de edad, lidera uno de los puntales del sindicalismo independiente en Cuba. Es evidente que la perseverancia de él y otros activistas ha dado resultados. Recientemente, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) demandó al Gobierno cubano el reconocimiento y la legalización de la Asociación Sindical Independiente de Cuba (ASIC), de la que Hernández es secretario general.La decisión de la OIT desnuda todos los argumentos de La Habana y muestra al mundo la situación que padecen los trabajadores cubanos.

“Es histórico y contundente. Por primera vez en 60 años, la OIT se pronuncia así contra el régimen cubano y envía un mensaje clarísimo, primero al régimen, a quien le dice que no puede continuar pisoteando impunemente los derechos de los trabajadores. Y, en segundo lugar, a sus víctimas, que son los propios obreros a quienes la tiranía les viola cada uno de sus derechos consagrados en los convenios de la OIT, firmados y ratificados muchos de ellos por el propio régimen”, opina Hernández Carrillo en declaraciones al Observatorio Cubano de Derechos Humanos.

Mientras tanto, el periodista, poeta y ex preso político Raúl Rivero celebra la noticia: “Un poco tarde, es cierto, se ha tenido que esperar 60 años, pero de una manera certera y eficaz y después de una batalla intensa, paciente y febril de los activistas cubanos, el Comité de Libertad Sindical de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ha publicado una pieza contra al gobierno cubano y exige el reconocimiento, la aceptación y la legalidad de la Asociación Sindical Independiente de Cuba (ASIC), una institución proscrita por los mecanismos oficiales de la Isla”

Iván Hernández Carrillo en rueda de prensa del OCDH, 2016.

¿Qué ha exigido exactamente la OIT a La Habana?

1. Que garantice el reconocimiento de la ASIC, así como su libre funcionamiento y ejercicio de actividades sindicales, de conformidad con los principios de la libertad sindical.

2. Que, a la luz de las decisiones en aplicación de los principios de la libertad sindical, garantice que se realice una investigación de todos los alegatos de ataques y otras modalidades de discriminación antisindical y se impongan las sanciones disuasorias y medidas compensatorias correspondientes.

3. Que le informe sobre el ejercicio del derecho de huelga en la práctica, incluido en relación a toda discriminación o perjuicio en el empleo que hayan podido sufrir los trabajadores por el ejercicio pacífico de dicho derecho.

Tras conocerse la decisión de la OIT, el Partido Popular de España (PP) pidió al Consejo de Europa que reactive una moción sobre la libertad sindical y los derechos de los trabajadores en Cuba, presentada en 2016, y que aún no ha sido debatida.

La moción pretende que el Consejo de Europa —una organización internacional de defensa y protección de la democracia— evalúe la situación de los derechos humanos en la isla, pues es “un documento básico para desarrollar el acuerdo entre la Unión Europea y Cuba”.

También en junio, la ASIC entregó en Ginebra una carta al director general de la Organización Internacional del Trabajo, Guy Ryder, en el marco de la 107ª conferencia anual de esa organización.

En la misiva, se relataron a los casos más recientes de represión contra líderes y miembros de su organización, y solicitó su intervención “directa y urgente” ante el régimen cubano.

“Nuestros activistas y dirigentes son amenazados de muerte, golpeados y sometidos a detenciones arbitrarias de manera permanente, y su derecho a viajar a actividades internacionales, vinculadas a su trabajo son impedidas sin explicaciones y sin causas para ello (…) El gobierno insiste en desconocer toda organización distinta al monopolio sindical oficial de la Central de Trabajadores de Cuba, organización conocida por su dependencia al Partido Comunista de Cuba, quien designa a sus principales dirigentes”, dijeron en la carta.

En sus declaraciones al Observatorio Cubano de Derechos Humanos, Iván Hernández Carrillo afirmó que el movimiento sindical cubano “se encuentra en un crucial momento de definición histórica, justamente cuando más reconocimiento ha recibido de la comunidad mundial”.

El movimiento sindical independiente cubano ha tenido un mes de junio histórico. Aunque difícilmente el Gobierno de Cuba cumplirá las exigencias de la Organización Internacional del Trabajo, los gremios internacionales y grupos de defensa de derechos humanos deben continuar presionando a La Habana.


Para apoyar a los líderes sindicales independientes de Cuba, visite: http://cubasindical.org y http://derechoseconomicos.com/

Para enviar quejas y denuncias sobre las violaciones a la libertad sindical en Cuba, consulte:Tribunal Administrativo de la Organización Internacional del Trabajo
Tel: +41 22 799 87 26/28
Fax: +41 22 799 87 37
Página web: ilo.org/tribunal
Correo electrónico: trib@ilo.org

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