EN CUBA los Consultorios del Médico y la Enfermera de la Familia, son instituciones de servicios públicos que se construyeron con el objetivo de brindar por barrios una mejor atención médica al pueblo cubano.
En el día de hoy quiero referirme al consultorio #44 ubicado en el Barón, El Paradero, San Juan y Martínez Pinar del Rio, Cuba, el área que rodea este Consultorio es eminentemente agrícola predominando la siembra del Tabaco con la presencia de un rio y posetas utilizados en los cultivos agrícolas, el mismo fue fundado en el año 1996, a sus inicios Diana Greter la Doctora que aquí laboró tuvo que realizar sus funciones atendiendo a los pacientes en el portal de las viviendas de Juanito Esposito y la del Chino Mosquera hasta que pudo levantarse este lugar, y lo que quiero destacar del mismo es su pésima construcción que degrada la imagen del organismo de la Salud en el Municipio quien al parecer no puso empeño suficiente para darles a los moradores de esta localidad un local con mejor confort, aunque es una unidad de tránsito para los pacientes es decir que no es una unidad hospitalaria para albergar enfermos, debería estar diseñado y acondicionado para que la estadía de los que allí asisten sea grata durante su permanencia.
Se dice que el sistema de salud es una de las grandes conquistas de la revolución cubana, pero yo en lo personal soy de los que digo que aún falta mucho para darle lo mejor al pueblo, este local no es solo que sea de madera, sino que su pequeña construcción parece estar hecha de recortes que se recogieron en cualquier vertedero y los que lo levantaron solo hicieron lo que pudieron con los pocos recursos que encontraron, de pequeño tamaño más bien parece estar hecha para guardar recursos e insumos para las campañas tabacaleras que a su alrededor se realizan, el área de este consultorio muestra niveles de deficiencia y discapacidad que existen en la población del mismo debido a enfermedades congénitas y otros a enfermedades adquiridas y los mismos deben ser recibidos en este centro cuando a él acuden con la mayor seguridad de la integridad física que ellos requieren por su estado y condición de salud, sin embargo el mismo no cuenta con una entrada para estos casos llegando a existir la llamada barrera arquitectónica, no cuenta con un baño no solo para los pacientes si no para los médicos y enfermeras que tienen que ir hasta las casas de los vecinos para realizar sus necesidades de primer y segundo orden, los días de consulta, por ejemplo de pediatría se reúnen para verse con la especialista un gran número de madres y muchas tienen que esperar sus turnos de pies con niños en sus brazos por la falta de asientos para acomodar a los pacientes, también existen problemas de ventilación sus paredes de madera acumulan polvo y telas de arañas, no cuenta con agua potable por no tener donde acumularla y su iluminación es bastante baja a pesar que su metro contador eléctrico se encuentra empotrado en la pared de tablas pudiendo provocar un incendio que destruya el lugar pues parece que el mismo no recibe inspección del organismo de bomberos, además cuenta con muy poco espacio de privacidad para la comunicación que debe existir entre médico y paciente de manera personal, no existe seguridad para los recursos que allí se encuentran por el tipo de construcción y por ser vulnerable al estar lejos de las viviendas, quizás por no tener las condiciones idóneas para clasificarlo como un consultorio es la razón por la que los que allí laboran no se han dignado a colgar una pancarta que diga aquí radica el consultorio #44 ya que el mismo esta sin identificar.
Esperemos que el organismo de salud del municipio de respuesta a todas estas inquietudes de los vecinos de esta localidad que son atendidos en este abandonado consultorio por no poseer las condiciones adecuadas para cumplir con el propósito que se construyo, pues en nuestras manos esta como defensores de los Derechos Humanos orientar a las personas a reclamar lo que les pertenece.
Atención en la Salud es derecho para todos por igual.