Madrid, 7 de junio de 2018
Estimado Presidente,
Aprovechamos la ocasión para desearle éxitos en su nueva tarea al frente del Gobierno de España.
El Observatorio Cubano de Derechos Humanos, con sede en Madrid, ha visto con preocupación, en los últimos 15 años, el deterioro del papel de España en la tradicional defensa de los derechos humanos en Cuba.
Creemos firmemente que es compatible defender los intereses españoles en Cuba y al mismo tiempo los derechos fundamentales de los cubanos.
La transición española hacia la democracia representa un ejemplo para los demócratas cubanos. Confiamos en que España se muestre contundente frente a las violaciones de los derechos humanos en Cuba.
La sucesión presidencial ocurrida en Cuba no ofrece la más mínima garantía para la democratización del país. Si no existe un mayor nivel de exigencia internacional, será improbable que el gobierno de Miguel Díaz-Canel mejore la grave situación de derechos humanos.
Al mismo tiempo, pedimos que España contribuya a moderar el peligroso optimismo de las instituciones europeas en relación con los acuerdos firmados con La Habana. Pensamos que la posición europea debe ser, en primer lugar, de exigencia hacia el respeto a los derechos fundamentales en Cuba, sin perjuicio de las políticas constructivas que puedan llevarse a cabo. Pero la apuesta europea de los últimos años ha sido de espaldarazo al régimen imperante en Cuba y ninguneo hacia la oposición democrática. Las consideraciones económicas o geopolíticas no deberían ser las únicas a tener en cuenta.
Esperamos de usted el apoyo hacia la causa de la democracia en Cuba y nos mostramos dispuestos a colaborar con cualquier información que requiera su Gobierno sobre la situación cubana. Su ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, conoce de primera mano el trabajo de la oposición democrática cubana, debido a sus responsabilidades anteriores en el Parlamento Europeo.
Reciba nuestro cordial saludo.
Alejandro González Raga
Director ejecutivo
Observatorio Cubano de Derechos Humanos
Desargue aquí la carta del OCDH al presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez
