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Miembros de la Alianza de Cristianos de Cuba analizaron la situación de los cristianos en el país

La Alianza de Cristianos de Cuba celebró este viernes su reunión trimestral con el fin de discutir temas relacionados con la actualidad cubana, la misión y la visión de la organización, así como para compartir propuestas sobre cómo servir mejor a las comunidades.

La reunión tuvo lugar en la sede la Iglesia pentecostal REHOBT de Santiago de Cuba, con la participación de 80 líderes religiosos, entre ellos 60 pastores, muchos con una importante implantación a nivel nacional.

Asistieron representantes de las provincias de La Habana, Mayabeque, Santi Espiritu, Las Tunas, Camagüey, Holguín, Guantánamo, Matanzas, Municipio Sagua de Tánamo y Santiago de Cuba, provincia anfitriona de la reunión. Una representación de diferentes denominaciones cristianas como la Iglesia, metodistas, anglicanos, bautistas y presbiterianos.

Los temas discutidos incluyeron, formas de fortalecer la colaboración entre las iglesias en Cuba, estrategias para la evangelización, formas de apoyar a las comunidades cristianas perseguidas en Cuba y planes para futuras reuniones.

Al final de la reunión, los participantes suscribieron una declaración donde se comprometen a trabajar en los objetivos comunes, por los principios de justicia, veracidad, rectitud y libertad de conciencia en un esfuerzo por sanar las heridas de la nación cubana.

 

Declaración final de la primera reunión del año 2023.

Alianza Cristianos de Cuba.

Nosotros: Líderes cristianos de varias denominaciones, miembros de la Alianza Cristianos de Cuba, reunidos en expresión de unidad, respeto y amor a nuestro Señor Jesucristo, para fortalecer la obra de Dios en la nación cubana, con énfasis en la presencia evangélica.

Nos comprometemos a desarrollar y mantener una confraternidad basada en el respeto mutuo y la colaboración, para auxiliar, sanar y edificar nuestras iglesias y comunidades, sobre las bases de la creencia en la importancia de la vida familiar, el valor inherente y la dignidad de todos los seres humanos, el respeto por el estado de derecho, el aprecio por la educación, el aprendizaje, la promoción de la justicia social y la caridad hacia los necesitados que son las bases del humanismo cristiano, así como alcanzar a aquellos que aún no conocen a Cristo.

 Para ello, nos uniremos en la oración, el estudio y la acción en favor del Evangelio. Reconocemos que existen muchas diferencias entre nosotros, pero afirmamos nuestro compromiso de buscar un objetivo común a través del diálogo, la comprensión y la aceptación mutua.

Nos comprometemos a regirnos por los principios de justicia, veracidad, rectitud y libertad de conciencia; reconociéndonos mutuamente nuestros derechos como ciudadanos de Cuba.

Nos comprometemos a trabajar por sanar las heridas de nuestra nación hambrienta, dividida y espoleada por un proyecto social inadecuado y sus secuelas de incertidumbre y dominación.

Nos esforzamos por crear una atmósfera de comprensión mutua, respeto y cooperación entre los cubanos de la isla y de la diáspora.

Trabajamos y trabajaremos para abogar por mayores libertades políticas, económicas y sociales, para que todos los cubanos puedan vivir con dignidad y autodeterminación. Nosotros buscaremos oportunidades para colaborar con organizaciones e individuos en Cuba que se dediquen a promover la democracia, los derechos humanos, las libertades civiles y la justicia social para todos.

Instamos a la inmediata liberación de todos los encarcelados por el ejercicio de sus derechos inherentes, convencidos de que, así como la injusticia provoca tensión social, la indiferencia ante el maltrato provoca sentimientos de ira, resentimiento y frustración si no se eliminan los factores que originan la tensión social, irremediablemente la violencia continuará escalando.

A menos de 60 días de iniciado el año, han sido asesinadas casi una decena de mujeres y otras se encuentran desaparecidas. nos unimos al dolor de sus familias y condenamos no sólo estos crímenes, sino la creciente ola de violencia por la que atraviesa la isla ante la indolente apatía del Estado.

Hacemos un llamado a todos los hermanos y hermanas cristianos del mundo a sostenernos en oración mientras nos esforzamos por el crecimiento, la armonía y el impacto para Su reino en todo nuestro amado país.

En el nombre de Jesús oramos, Amén.

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